El Servicio Nacional del Consumidor (Sernac) emitió una alerta de seguridad, para advertir sobre una estufa a kerosene que fue vendida desde 2014, pese a que nunca completó el proceso de certificación y, por lo tanto, puede representar un riesgo para quienes la tengan.
Se trata de las estufas a kerosene marca Norwood, modelos NPV-2310 y NPM-2310, que fueron comercializadas en Chile entre abril de 2014 y abril de 2015.
Éstas tienen una capacidad de estanque 5,3 litros, son para uso doméstico de color blanco, y en total se vendieron 24.231 unidades en un año.
Según informó la entidad pública, estos productos no cumplieron la totalidad del proceso de certificación que se requiere para ser comercializado, y que es otorgado por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC).
Por lo tanto, pueden representar “un riesgo para la seguridad de los consumidores”, señaló el Sernac en su sitio web.
Al respecto, añadió que “la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) ha prohibido la comercialización de las unidades que se encontraban en stock, en tanto se tomen las medidas correspondientes”.
Quienes tengan una de las estufas, deben contactarse con la empresa, ya que a partir del martes 2 de junio la compañía va a comenzar a cambiarlos por una estufa nueva y certificada, o por otro producto de la línea Norwood (calefacción o ventilación).
Para ponerse en contacto con la empresa, puede llamar al teléfono +562 2719 4120, escribir al correo electrónico servicioestufas@2delectronica.cl o ir a las oficinas en av. Colorado 941, Quilicura (región Metropolitana).
Cabe destacar que según lo informado por la compañía, hasta ahora no se han reportado incidentes o daños que hayan sido provocados por estos calefactores.